A inicios del mes pasado se realizó en la ciudad de México la Cumbre de los Océanos, organizada por The Economist. Durante tres días se reunieron líderes políticos, funcionarios públicos, representantes empresariales, científicos, representantes de ONG y funcionarios de organismos multilaterales para dialogar sobre el uso sostenible de los océanos y sus recursos.
Fueron tres los temas principales: pescados y mariscos sostenibles; contaminación y plásticos, y cambio climático. En cada tema se discutió sobre políticas públicas, aspectos financieros, necesidades de investigación, novedades de la tecnología y la innovación, entre otros.
En la sección de pescados y mariscos sostenibles, el eje de la discusión fue cómo los océanos pueden generar alimentos en el largo plazo, asegurando la sostenibilidad de las pesquerías, lo cual está en línea con el propósito que nos hemos trazado en nuestra institución: Alimentamos al Perú y al mundo, cuidando el mar.
En esta sección, uno de los elementos centrales fue la presentación de Principios para In- versión en Pesquerías Sustentables, que buscan orientar a entidades financieras en la evaluación de proyectos pesqueros. Entre los principios a tener en cuenta están cumplir con normas nacionales e internacionales, estado actual de la pesquería, estado futuro de la pesquería, monitoreo y control, trazabilidad y transparencia, entre otros.
En Perú hay tareas importantes por abordar para que todas las pesquerías cumplan estos principios. Un aspecto clave es monitorear adecuadamente cuánto se está pescando, lo cual requiere la actuación articulada del Ministerio de la Producción y gobiernos regionales en contar con un buen sistema de registro de descargas que permita tomar mejores decisiones.
En cuanto a trazabilidad, es importante monitorear quiénes pescan y a dónde van sus capturas, pues solo así se podrá frenar realmente la pesca ilegal. Ello es importante para asegurar que las cuotas globales y vedas sean respetadas, y también de cara a las mayores exigencias de los mercados, los cuales en el futuro solo comercializarán productos en que se pueda acreditar el origen y trazabilidad de los mismos desde que salieron del mar.
En cuanto al cumplimiento de normas y la situación actual y futura de la pesquería, el documento de principios resalta los acuerdos internacionales sobre pesca de Naciones Unidas, así como las directrices voluntarias de FAO.
Respecto de lo anterior, tuvimos ocasión de exponer en el evento paralelo (a la mencionada Cumbre) de la Asamblea del Océano Pacífico en que participaron diversas autoridades públicas de pesquería y medio ambiente de países americanos. Se habló sobre la importancia de establecer una adecuada institucionalidad para la sostenibilidad, lo cual pasa por la mayor instauración de la gestión pesquera en base a asignación de derechos, según recomiendan expertos pesqueros, organismos internacionales, así como la Directriz Voluntaria de FAO sobre la “Gobernanza responsable de la tenencia de la tierra, la pesca y los bosques en el contexto de la seguridad alimentaria nacional”.
En diálogo con otros participantes, se vio la importancia de contar con una adecuada gobernanza para enfrentar además los otros dos temas de la cumbre: una adecuada gobernanza permitirá tener biomasas de peces más saludables que puedan enfrentar la contaminación y los plásticos, y favorecerá además la adaptación de los actores a los cambios en la distribución y abundancia de recursos pesqueros que pueda traer el cambio climático.