Lima, 15 de marzo de 2017.- El establecimiento de cuotas de pesca y la regulación del número de embarcaciones, de vedas y de temporadas de pesca han permitido proteger los recursos hidrobiológicos marinos, mejorar el abastecimiento y generar nuevas inversiones e innovaciones en procesos y productos a favor del consumidor y las economías.
Así lo señaló el experto del Buró Nacional de Investigación Económica de Cambridge y profesor de Economía de la Universidad de California, Gary Libecap, durante su exposición “La evolución de la gestión pesquera en base a derechos o incentivos y la asignación de permisos de pesca”, que ofreció como parte de las Conferencias sobre Sostenibilidad Marina que organiza la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP).
Ante directivos de instituciones públicas, miembros del gremio pesquero industrial, profesionales y estudiantes, Libecap explicó que aquellos sistemas de libre acceso a la pesca terminaron en muchos casos con la depredación de los recursos, como ocurrió con la anchoveta y la sardina en algunas zonas de Estados Unidos.
En ese sentido, refirió que un sistema de pesca de acceso abierto puede definirse como la “Tragedia de los Comunes”, en la que todo pertenece a todos y en el que nadie tiene incentivos para mejorar su producción, conservar las especies, invertir e innovar en nuevos productos o sistemas. “Cuando existe un acceso abierto a la pesca, se genera la presencia de muchos barcos detrás de pocos peces”, agregó.
Libecap aseguró que el establecimiento de límites al acceso y cuotas para la extracción a favor de las empresas que ya venían pescando generó beneficios para la sostenibilidad y las economías. Al respecto, explicó que a nivel internacional el establecimiento de cuotas se determina en función del volumen histórico que venían capturando los pescadores de manera previa.
Resaltó que en el mundo a fines de la década pasada ya 25% de pesquerías venía siendo gestionada con cuotas individuales de pesca y que, de éstas, en 68% de los casos se había utilizado la pesca histórica para asignar derechos. Mencionó que las subastas solo dan buenos resultados en pesquerías nuevas, en que no hay pescadores; así, mencionó por ejemplo que en Estonia y Rusia utilizaron primero subastas, pero ante los malos resultados luego implementaron las cuotas en función de pesca histórica.
El experto indicó que el sistema de cuotas de pesca a largo plazo ha resultado más beneficioso para el sector, por cuanto se trata de un sector que ya tiene de manera inherente mucha incertidumbre, como aspectos climáticos, oceanográficas, entre otros. Resaltó que solo con derechos permanentes se logran los resultados esperados en términos de sostenibilidad, así como también de innovación y eficiencia en la actividad pesquera.
En otro momento de su exposición, Libecap señaló que la restricción al acceso a la pesca y el establecimiento del sistema de cuotas se puede aplicar a todos los sectores: industrial, mediano y artesanal. También agregó que en el caso de la pesca de pequeña escala, cuando existe un gran número de pescadores, se pueden establecer permisos y cuotas en función de comunidades de pescadores.
Por su parte, la presidenta de la Sociedad Nacional de Pesquería, Elena Conterno, señaló que el Perú aún tiene una serie de retos en cuanto a regulación y asignación de cuotas para asegurar la sostenibilidad de los recursos y generar un entorno para mayor eficiencia e innovación en las empresas del sector, y mejores rendimientos económicos para los pescadores artesanales.