De acuerdo con los estimados de la Organización Mundial de Ingredientes Marinos – IFFO, en el 2017 la producción mundial de harina de pescado alcanzará los cinco millones de toneladas métricas (TM), de las cuales 1.2 millones vendrán de Perú.
Esta cifra significa que Perú aportará con el 24% de la producción mundial, bastante mejor al desempeño de los últimos años, en que su participación fue de aproximadamente 15%. En el caso del aceite, se estima una producción mundial de 950 mil toneladas, de las cuales Perú producirá 183 mil. Esto representa una participación de 19% de la producción mundial, otra vez muy por encima del 12% que venía registrando en los últimos años.
Estas cifras nos configuran un escenario de crecimiento en la producción de ingredientes marinos – con un aumento de 16% en la producción de harina y de 7% en la producción de aceite – donde el Perú vuelve a ser primer productor mundial.
Ahora bien, de acuerdo a la Ley de Oferta y Demanda, a más oferta de los productos, con una demanda estable, el equilibrio se retoma luego de que los precios se ajustan a la baja. De hecho, el portal especializado Ychart reporta una fuerte caída del precio internacional de la harina de pescado.
Retomar los mercados perdidos en los últimos años no será fácil, y ello se logrará en un escenario de precios bajos. Sin perjuicio de ello, las empresas están comprometidas en capturar toda la cuota asignada y dinamizar las ciudades costeras del país con las tareas de pesca y manufactura de ingredientes marinos, así como con el dinamismo que estas actividades tendrán en actividades conexas.