Hace unos días, lanzamos por segundo año consecutivo nuestra campaña “Salvemos al Cebiche 2017”, que es una de las líneas de trabajo de la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP) en su preocupación por la sostenibilidad y el
consumo responsable de pescado.
Pero, ¿por qué salvar el cebiche? Pues porque como consumidores todavía no somos conscientes de nuestro papel en el cuidado de las especies hidrobiológicas y a veces cuando vamos a un restaurante pedimos cebiche de un pescado X aunque esa especie esté en veda, o no sea lo que el mar dio ese día.
Entonces forzamos y ejercemos presión a la cadena restaurante – comercializador – pescador para que consigan el pescado que queremos al “precio que sea”.
Por ello, para que muchas más generaciones disfruten de nuestro plato bandera, desde la SNP estamos comprometidos con esta campaña, en la que buscamos impulsar el respeto de vedas y tallas mínimas, promover la pesca del día (es decir, lo que te da el mar) así como impulsar el consumo de pescados azules (caballa, bonito y jurel) así como peces cultivados (trucha y paiche) para reducir la presión sobre los peces de carne blanca.
En este punto, me gustaría resaltar que el cebiche elaborado con pescados azules como caballa, bonito y jurel es rico, nutritivo y económico. No por nada recientemente el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) incluyó a los pescados azules como parte de la oferta exportable peruana denominada Superfoods, la cual ya tuvo su primera exposición en Alemania y se alista para hacer lo mismo en Bruselas con gran aceptación.
Finalmente, recordemos que si comemos a un pez por debajo de su talla mínima también nos estamos comiendo a su descendencia. ¡Salvemos todos al Cebiche!